Los rayos
X son una forma de energía radiante, como las ondas de luz o de radio. A
diferencia de la luz, los rayos X pueden penetrar el cuerpo, lo que permite
producir imágenes de las estructuras internas. El radiólogo puede ver estas
imágenes en una película fotográfica o en el monitor de una TV o computadora.
Las
zonas más radio sensibles son: genitales, tiroides y los ojos. Por eso si es
posible se protegen con materiales que no dejan pasar los rayos x, para evitar
que se dañen.
La persona que te hace la radiografía
se sale fuera del cuarto o se ponen un traje especial por el que no puede pasar la radiación. Con una radiografía no penetraría en nuestro organismo una cantidad significativa de radiación, pero si tienes que hacer muchas, como es el caso de los radiólogos/as, sí que se acumularía en su organismo una alta cantidad de radiación que le causaría enfermedades.
Aportado por Helena, Lucía Albentosa, Luna
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